Explotación/Trabajo infantil… imposible mirar hacia otro lado

Por Daniela Sánchez Lemus

La explotación o trabajo infantil, incluye todas aquellas actividades que privan a niñas, niños y adolescentes de su infancia, su potencial y su dignidad, afectando negativamente su educación, salud y desarrollo físico y mental, hasta convertirse en una problemática que violenta sus derechos humanos.

Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en el mundo hay más de 218 millones de niñas y niños con un rango de edad entre 5 y 17 años, que se encuentran ocupados en la producción económica. De ellos, casi la mitad, 152 millones, son víctimas del trabajo infantil y 73 millones se encuentran en situación de trabajo infantil peligroso.

En Guatemala casi un millón de niñas, niños y adolescentes son parte de la fuerza laboral: casi 7 de cada 10 son hombres. Más de la mitad es indígena.

En 2019, la Comisión Contra el Trabajo Infantil dejó de funcionar. En 2020 surgió la Coordinadora Interinstitucional Contra la Explotación Laboral y Trabajo Infantil (CICELTI), de la cual, a la fecha, solamente hay una página de la campaña “Yo me Sumo”, con números para hacer denuncias. 

¿QUÉ OBLIGA A LAS NIÑAS Y NIÑOS A TRABAJAR?

  • Pobreza, obliga a las y los menores de edad a hacerse responsables y participes de ayudar a sus padres, cuando los tienen.
  • El bajo nivel de educación e información de los padres, quienes pueden llegar a  desconocer el impacto negativo del trabajo en sus hijas e hijos.
  • El difícil acceso a la escuela y el sistema educativo deficiente: imposibilidad de cubrir los materiales educativos, distancia geográfica, etc. son obstáculos para la educación y factores agravantes en el trabajo de los niños.
  • Falta de Mecanismos Estatales,  también de una legislación sobre trabajo infantil vigente y el impacto positivo de la educación.
  • Desinterés de las grandes empresas por que algo cambie: la niñez es considerada mano de obra “barata”. 
  • Crisis humanitarias vinculadas a un desastre natural o un conflicto, lo cual agrava la vulnerabilidad de las niñas y los niños y la transgresión de las leyes vigentes.

La explotación infantil es una realidad mundial que nos obliga a repensar de qué forma como sociedad estamos cuidando a nuestra niñez.

Las distintas formas de “trabajo” infantil se listan de la siguiente manera:

Agricultura

Globlamente, los alimentos que se consumen  son producidos por menores de edad en condiciones de peligro, sobretodo cuando deben hacer uso de  plaguicidas, herramientas y equipo peligroso. “Trabajar en el campo es sumamente difícil, es una actividad física que muchas veces no se compensa con una buena alimentación poniendo en mayor peligro a los niños.”

Menores trabajan en campos de algodón en Pakistan

Industria

Incluye confección de ropa, fabricación de químicos, fuegos artificiales, pulido de piedras preciosas,  entre otras actividades peligrosas, llegando a producir enfermedades respiratorias, intoxicación, quemaduras, lesiones oculares y perdida de audición.

Afiche campaña “Rompe la Cadena no compres explotación” de JOCA Américas

Trabajo Doméstico

En este ámbito, son las niñas las más afectadas; para la IAFC es uno de las peores formas de trabajo infantil, debido a que los horarios y responsabilidades pueden llegar a sobrepasar a las menores, dejándolas sin acceso a educación o atención médica “eventualmente, están expuestas a maltrato físico y sexual

Minería y Canteras

La OIT estima que aproximadamente un millón de niñas y niños entre los 5 y 17 años trabajan en minas y canteras alrededor del mundo. En las minas, deben descender por túneles improvisados, angostos y con nula iluminación. “Se arriesgan constantemente a sufrir accidentes mortales debido a la caída de rocas, explosiones, y desplome de paredes de la mina”, donde realizan un trabajo de personas adultas. En las minas de extracción de oro, se exponen a la toxicidad del mercurio el cual se utiliza para separar el oro de la roca, llegando a dañar órganos internos y el sistema nervioso.  «Cuanto más remota e informal es una actividad de minería de pequeña dimensión, más probable es que participen niños«, afirma Norman Jennings, experto de la OIT en el sector minero.

Menor de edad en cantera Boliviana

Explotación Sexual

Una niña, un niño o un adolescente es víctima de explotación sexual (ESIA) cuando participa en actividades sexuales a cambio de algo, ya sea una ganancia económica o bien de otro tipo, o incluso la promesa de los mismos para una tercera persona, la persona agresora, o incluso la propia niña, niño o adolescente.  Suele ir aconpañada por violencia física, amenazas, etc. o bien pueden darse factores más complejos, entre los que se incluyen el desequilibrio de poder entre la víctima y la persona agresora o una relación de confianza.

Trabajo Informal

Las Naciones Unidas estiman que 150 millones de niñas y niños se definen como “niñas(os) de la calle”; quienes en su  mayoria recurren al trabajo informal para asegurar su supervivencia. 

Menor trabajando en taller mecánico.

Explotación por parte de grupos criminales

Según la Comisión Interamericana de derechos Humanos (CIDH) las principales formas de uso y explotación de niñas, niños y adolescentes por parte de grupos criminales de América son :

  • Producción, distribución, tráfico y venta de drogas
  • Trafico de migrantes
  • Acciones de vigilancia, robos, extorsiones, secuestros homicidios, traslado de armas.

Producción de Café

Para Fernando Morales de la Cruz,  fundador de Cartoons for Change, Café for change, Songs for Change para erradicar el trabajo infantil, la esclavitud y la probreza, «Las familias que viven del cultivo y recolección del café  son muy pobres y los niños no van a la escuela, sino que recolectan café”  «Esos niños están cosechando café porque son la mano de obra más barata y abundante que existe.”

Fernando Morales de la Cruz

¿CÓMO AFECTA EL TRABAJO A LA NIÑEZ?

Las repercusiones del trabajo infantil son graves y afectan a varios ámbitos: 

  • Salud: 73 millones de niños están sujetos a trabajos peligrosos. Las condiciones laborales pueden ser perjudiciales para su salud: también pueden lesionarse con herramientas inadecuadas para su edad, sufrir las consecuencias de manipular sustancias tóxicas, llevar cargas pesadas que van en detrimento de su desarrollo físico. Las menores violentadas pueden ser víctimas de  embarazos tempranos y de Infecciones de transmisión sexual.
  • Educación: las niñas y niños que trabajan no tienen tiempo para asistir a la escuela.
  • Violencia:  Las niñas y los niños, en su condición de vulnerabilidad son blanco  fácil de múltiples formas de violencia en su lugar de trabajo.

El 12 de junio se celebra el Día Mundial contra el Trabajo Infantil, es en este sentido que Morales de la Cruz le ha dirigido una carta a la Primer Ministra de Noruega, Erna Soldberg, en donde le menciona que “la Convención sobre los Derechos del Niño está integrada en la legislación noruega en la Ley de Derechos Humanos, (…) Según la Constitución noruega, artículo 92 , «Las autoridades del Estado respetarán y garantizarán los derechos humanos tal y como están escritos en esta Constitución y en los tratados de derechos humanos que son vinculantes para Noruega«. Artículo 104 de la Constitución, «Los niños tienen derecho a que se respete su valor humano«.

Fuentes: International Aid For Children(Ayuda Internacional Para Niños), Organización Interamericana del trabajo (OIT), Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Por Factor4

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